Buenas tardes delegados y Presidencia.

Creo importante reflexionar sobre las acciones de los propios habitantes de las localidades, tal y como sucedió el pasado verano en Mallorca, donde colocaron falsos carteles cerca de las playas con gran masificación de turistas para así reducir el número de visitantes. Esto nos da un claro ejemplo de que no solo el planeta está cansado de la sobreexplotación y el turismo de masas, también la población local.

Está demostrado que el turismo trae contaminación acústica, deterioro de los edificios y polución, además de la subida de los alquileres de la vivienda, alimentos y contratos laborales precarios. Problemas de los que no solo se dan cuenta los gobiernos sino también la propia comunidad local. Por esto cualquier propuesta de mejora en estas localidades serán bien recibida por los habitantes y ayuntamientos, que son los que deben provocar el cambio.